Por: Alfonso Calvo Tapia

Conocida es la suerte que ha corrido el Villanovense de fútbol tras su desastrosa temporada deportiva donde, a pesar de los esfuerzos finales, no ha podido sortear el descenso a Tercera División después de cinco temporadas militando en categoría nacional. A todo ello hay que sumar la asfixia económica con deudas que superar los 700.000 euros a diferentes instituciones y que, por supuesto, no va acarrear ninguna consecuencia para los responsables del desaguisado.

De momento, y a falta de la celebración de una asamblea de socios que se tendrá que celebrar en breve, hemos conocido ya el adiós del director deportivo, Rafa Ocaña, tras cumplir su contrato de dos años firmado con la entidad. Llegó a Villanueva de la Serena en el peor momento, con cambio de directiva y problemas económicos, y con eso ha tenido que apechugar penalizando en demasía su gestión y dejando un mal sabor de boca entre la afición verde.

Por otro lado, el presidente de la entidad, Javier Nieto, tras consumarse el descenso ha emitido una carta dirigida a los aficionados donde pide “perdón por los errores cometidos” y donde apela a que “hoy más que nunca os pedimos que sigáis a nuestro lado. No prometemos milagros ni soluciones fáciles. Prometemos evaluar y corregir los errores cometidos, pero sobre todo prometemos trabajo y compromiso, porque este escudo no se arrodilla ante la adversidad, porque llevamos la lucha en las botas y la pasión en el pecho. Que nadie dude que esta historia tiene todavía muchas páginas por escribir… y queremos que sigáis escribiéndolas con nosotros”, señaló Nieto en la misiva.