Los robos que no cesan en la comarca

Hace unas semanas fue en los restaurantes Dalí y Stop de la avenida de Madrid de Don Benito, posteriormente en varios establecimientos hosteleros de Villanueva de la Serena, también en el nuevo recinto ferial y ahora en otros dos locales gastronómicos de la localidad calabazona, el restaurante Martín Pozo de la avenida Torre Isunza y el Hotel Veracruz, de la carretera entre ambas ciudades de Don Benito y Villanueva.

En la práctica totalidad de todos estos robos, el modus operandi es el mismo, una ejecución rapidísima, de apenas tres minutos para forzar las máquinas tragaperras de los locales y sustraer el dinero del interior. Las fuerzas del orden, que han informado que se trata de bandas organizadas, no pueden con esta escalada de sucesos y los dueños de las máquinas recreativas están intentando ingeniárselas para poner freno a estos robos, con nuevos dispositivos de seguridad.

Se está dando la circunstancia de que algunos establecimientos dejan de madrugada a la vista y cerca de las puertas las máquinas tragaperras abiertas para que no las destrocen. Un ejemplo ha sido en el Hotel Veracruz la semana pasada, pero aún así, han accedido al interior y se han ensañado con la otra máquina tragaperras existente en el local.